¿Es trastorno limítrofe de personalidad o estés postraumático?

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El trastorno limítrofe de personalidad (TLP) es un trastorno mental omnipresente y vitalicio que afecta a las relaciones interpersonales, el humor y el comportamiento. Aquellos diagnosticados con TLP suelen batallar con una autoidentidad y autoimagen inestables, dificultad para regular sus emociones, comportamientos impulsivos y autosaboteadores, terror al abandono, sentimientos de vacío y un patrón de relaciones altamente inestables donde abundan la idealización y la devaluación.

A pesar de que aquellos que desarrollan TLP pueden tener un historial de abuso infantil o negligencia, las causas del TLP no se suelen entender del todo. Sin embargo, algunas investigaciones sugieren lazos con la genética con un historial familiar o predisposición biológica al trastorno, mientras que otras investigaciones respaldan una relación con el ambiente.

El Estrés Postraumático Complejo, o TEPT-C es un subconjunto del EPT. Mientras que el EPT es un trastorno basado en el miedo, el TEPT-C suele referirse como un trastorno basado en la vergüenza surgido de un historial de exposición crónica y a largo plazo a eventos traumáticos como abuso infantil severo o un abuso prolongado en una relación. Aquellos que han experimentado trauma constante a una edad muy corta y/o en donde escapar de la situación no era posible ante un mayor riesgo de desarrollar TEPT-C como los niños que no pueden escapar de su ambiente familiar. Los síntomas incluyen recuerdos de los eventos, temor, desesperación, vergüenza, devaluación crónica del ser, terror y evasión de socialización o relaciones. Desafortunadamente, aquellos que han experimentado trauma severo y constante en la niñez están en riesgo de ser retraumatizados en la edad adulta, especialmente en relaciones amorosas, incrementando así su riesgo de desarrollar TEPT-C o de empeorar los síntomas existentes.

Similitudes entre TLP y TEPT-C

El TLP y TEPT-C suelen ser confundidos debido a sus comportamientos y patrones de comportamiento similares y con frecuencia superpuestos. Ambos vienen con angustia emocional generalizada considerable y/o “detonantes” emocionales, pensamientos suicidas, disociación, flashbacks, ansiedad y depresión. Incluso con criterios sofisticados de diagnóstico, hay comportamientos y patrones afectivos que se superponen entre los dos trastornos lo que puede complicar si los síntomas son exclusivos de un trastorno o una combinación de los dos.

Adicionalmente, ambos diagnósticos se enfrentan a problemas con un autoconcepto negativo, dificultades en la regulación de sus emociones, incluyendo explosiones de llanto o ira, y problemas interpersonales considerables. Tanto el TLP como el TEPT-Cpueden diagnosticarse en conjunto en una persona en la que los síntomas van de altos a bajos en uno o dos de los trastornos.

Diferencias clave entre TLP y TEPT-C

• Mientras que menos trastornos podrían experimentar síntomas asociados con temor dentro de las relaciones, un factor distintivo observado en TLP que no se suele ver en el TEPT-C es el miedo al abandono. Sin embargo, quienes padecen TEPT-C pueden llegar a evitar relaciones debido a que se sienten de alguna manera imposibles de amar o no merecedores de amor debido al abuso que soportaron que pueden superponerse con sentimientos familiares experimentados en TLP. De manera similar, aquellos con TEPT-C con frecuencia evitan por completo las relaciones o alejan a otros porque los consideran inseguros o amenazadores; estos comportamientos pueden confundirse con el miedo al abandono observado en aquellos con TLP.
• Aquellos con TEPT-C con frecuencia pueden sentir vergüenza y culparse por sus problemas interpersonales, un síntoma que también es similar a las experiencias de aquellos con TLP. Sin embargo, otra diferencia clave es que aquellos con TEPT-C no suelen autolesionarse; esto es un comportamiento más común entre aquellos con TLP, donde los factores estresantes en las relaciones interpersonales podrían activar episodios de autodaño. Esto puede incluir ideaciones suicidas o un intento de suicidio.
• Otra diferencia clave entre los dos es que mientras que ambos pueden sentir que las relaciones son inseguras o amenazadoras, una persona con TEPT-Ccon frecuencia elige evitar la intimidad o las relaciones por completo. Por otro lado, una persona con TLP puede batallar con la soledad y usar las relaciones para evitar sentimientos de soledad o abandono.
• Mientras que tanto las personas con TLP como aquellas con TEPT-C batallan con la regulación emocional y suelen experimentar explosiones de ira o llanto, aquellos con TEPT-C pueden experimentar adormecimiento emocional, vacío o una desconexión de sus emociones.
• Adicionalmente, mientras que ambos pueden tener problemas con lograr un autoconcepto sólido, aquellos con TLP suelen batallar con comprender quiénes son en el fondo. Pueden cambiar sus intereses y pasatiempos dependiendo de con quién se asocian debido a una autoidentidad limitada. Por otro lado, aquellos con TEPT-Ccomprenden y están conscientes de quiénes son y tienen una autoidentidad más estable. Sin embargo, batallan con sentirse “dañados” o merecedores del dolor que han sufrido y cargan con creencias erróneas sobre sí mismos, como sentirse indignos de amor o de felicidad. Estas experiencias impactan sus relaciones, que podrían confundirse como un problema con la autoidentidad y la autoconsciencia.
• Finalmente, mientras que ambos suelen batallar con pasados traumáticos, con un tratamiento exitosos, aquellos con TEPT-C pueden experimentar reacciones menos emocionales o disrupciones de comportamiento con el tiempo al llevar a cabo estrategias calmantes o redirigir su energía, alejándola del estresante emocional para reducir los síntomas asociados con los ataques de pánico.

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