Cómo devalúa la mujer psicópata

La interacción de la psicópata femenina con los demás es una paradoja. Los necesita, y a menudo le da a las personas un afecto exuberante, pero obtiene placer cuando los devalúa. Esta devaluación puede parecer inusual y contradictoria, ya que, en la superficie, parece que le gustan sus víctimas. Pero esto no es verdadero afecto o conexión. Es una consecuencia de su obsesión patológica consigo misma, y de cómo utiliza a los demás para construir una falsa percepción de autoestima. Esto ayuda a contrarrestar su percepción de sí misma como víctima.¹

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Algunas formas de devaluación psicopática

¿Cómo se sentiría exactamente esta devaluación? Puede venir de muchas formas, no siempre obvias. Puede ser tan inocua como menospreciar constantemente, ignorarte abiertamente, no regresarte las llamadas como prometió o acortar las llamadas. Te sientes decepcionado, pero ella se siente en control. Subiendo la apuesta, la psicópata femenina puede devaluar creando historias falsas sobre ti y circulándolas a otros, para desacreditarte y arruinar tu reputación. En el extremo, la devaluación puede ser tan severa que la psicópata femenina se siente justificada en abusar físicamente de la víctima.

El uso de la postura de la víctima por parte de la psicópata femenina

Cuando una psicópata femenina habla, en algún lugar de la conversación a menudo la escucharás decir cómo fue engañada o privada de alguna manera, a menudo con una mirada de "pobre de mí" en sus ojos. Esta es la clásica "postura de víctima".”² Ella busca tener personas a su alrededor y parece ser social, cómica y, a veces, incluso puede parecer generosa. Ella puede dirigir a una audiencia con su charla animada y su lengua parlanchina. Pero esto es simplemente la otra cara de su estrategia para impulsarse a sí misma al devaluarte.

La devaluación de sus propios hijos por parte de la psicópata femenina

La devaluación de la psicópata femenina puede ser especialmente perjudicial para sus hijos. Son sus objetos, sus posesiones, para hacerles lo que quiera. Como resultado, a menudo los descuida y tiene poco o ningún respeto por ellos. Puede usarlos a voluntad, ignorarlos o abusarlos, menospreciarlos, reprocharlos y devaluarlos. Si es encarcelada, la psicópata a menudo trata de presentarse como una buena madre para los entrevistadores y usa la separación de sus hijos para ganar simpatía. Pero esto es una treta. Investigaciones recientes concluyen que tiene poco interés en sus hijos, un hallazgo consistente con la forma en que los devalúa.³

La devaluación puede ser difícil de detectar o admitir

La víctima de la psicópata femenina a menudo no sabe cuándo está siendo devaluada. Las pequeñas pistas a menudo se ignoran debido al encanto y la ligereza de la psicópata. ¡Por supuesto, ella siempre tiene la razón y nunca se equivoca! Los que la desafíen serán castigados de una manera que solo ella conoce. Si la víctima sospecha de sus motivos, el psicópata se apresura a "jurar por su madre muerta" que nunca la lastimaría. Por convincente que suene, lo que la víctima no sabe es que la psicópata odiaba a su madre muerta, y sus promesas no significan nada.

Habiendo sido constantemente devaluada, cuando la víctima ya no sirve a las necesidades del psicópata, la víctima puede ser descartada. Esto puede dejar a la víctima con sentimientos encontrados que a menudo no se pueden identificar ni explicar. Estas pequeñas pistas pueden eludir la atención porque la víctima se niega a culpar a la persona encantadora detrás de la devaluación. A menudo es capaz de engañar a su víctima una y otra vez. Pero cuidado, esto me recuerda una advertencia del estimado investigador de psicopatía, J. Reid Meloy, que recibí hace algunos años: "La psicópata femenina camina entre nosotros. Puede encantar como un pájaro cantor, pero picará como un escorpión”.⁴