5 Cualidades para buscar en un compañero de vida

Recientemente estaba pensando en cómo solía comportarme en las relaciones, antes de aprender sobre la ciencia de las emociones y el apego.

Yo era dura con los chicos.

Cuando mis relaciones iban sin problemas, era fácil actuar bien y ser comprensiva. Pero en tiempos de conflicto, como cuando mi chico quería ver a sus amigos en lugar de a mí, o ver un partido en la televisión en lugar de atenderme, o cuando dejaba sus calcetines sucios en nuestra sala de estar, tomaba sus acciones personalmente.

¿Yo no importaba?

¿Dónde quedaba?

Me enojaba y a veces decía cosas crueles, que casi siempre lamentaba más tarde.

Yo hablaba en extremos: “¡Nunca haces _______________!” O, "¡siempre haces ___________________!”

Mi formación como psicoterapeuta para parejas e individuos me enseñó el poder y el valor de la comunicación positiva.

Lo que aprendí cambió mi vida personal.

Las relaciones románticas son un desafío para todos. No importa cuán geniales parezcan las parejas en Facebook, no importa cuantas fotos de besos, abrazos y amor veas de tus amigos, ninguna relación íntima está libre de problemas.

Esto se debe a dos hechos que están en completo conflicto entre sí:

1. Todos nosotros tenemos necesidades innatas de amor, cuidado y atención, que, cuando no se cumplen, desencadenan emociones centrales de ira y tristeza en el cerebro. Con el tiempo, podemos defendernos contra estas necesidades de varias maneras. Pero eso no significa que las emociones no estén sucediendo;  solo las hemos bloqueado de la experiencia consciente.

2. Las personas en relaciones no pueden satisfacer de manera realista todas las necesidades de su pareja.

Teniendo en cuenta estos dos hechos, inevitablemente, habrá veces que nos sentiremos no amados, no queridos o apreciados, heridos y enojados. Eso no está mal. Eso no está bien. ¡Simplemente es!

La investigación realizada por el Instituto Gottman mostró que la forma en que manejamos nuestros conflictos inevitables es un importante predictor de la longevidad de la relación. Podemos convertirnos en profesionales en el manejo de conflictos. Pero, como dice el refrán, se necesitan dos para bailar tango, por lo que debemos elegir un compañero que trabaje con nosotros para construir una relación larga y satisfactoria.

Las siguientes son 5 cualidades a buscar en una pareja. Estas cualidades ayudan a asegurarles que serán capaces de moverse a través de los tiempos difíciles e incluso acercarse más como resultado. Incluso recomendaría poner estos requisitos en la página de tu perfil de citas para eliminar a aquellos que no estén interesados en la comunicación sana. Aquí hay una muestra:

SE BUSCA PAREJA: alguien que valore la empatía y la intimidad emocional, y entienda la importancia de hablar para resolver problemas. Debe tener conocimiento previo de cómo funcionan el cerebro y las emociones en las relaciones íntimas o estar dispuesto a aprender. Debe tener la voluntad de discutir los valores de la relación.

Las 5 Cualidades

1. Capacidad de empatía. La empatía es la capacidad y la voluntad de ponerse en la piel de otra persona e imaginar cómo se siente (que puede ser completamente diferente de cómo ves y sientes las cosas tú). Sin empatía, ¿cómo nos entendemos? Sin la capacidad de empatía, tratarte con compasión, amabilidad y consideración probablemente no sea una prioridad para tu pareja.

2. Humor. Cuando las relaciones son tensas, el humor puede calmar una pelea y transformar un mal momento para mejor.

Por ejemplo, Roberto sabía el momento adecuado para usar el humor con Jessica. Podía saber cuando su estado de ánimo cambiaba para peor. Jessica de repente se ponía crítica con Roberto, fijándose en las cosas que por lo general no le importaban. Roberto podía sentir que Jessica estaba irritada con él.

En lugar de ponerse a la defensiva o retirarse, dos estrategias que rara vez ayudan, él le decía con calidez en sus ojos y una voz tonta: "¿estás tratando de pelear conmigo?”

Esto detenía a Jessica y la obligaba a contemplar su pregunta. "¿Estoy tratando de pelear?” ella se preguntaba a sí misma. "Sí, supongo que sí”.

Su humor le hacía posible tomar conciencia de ello y responsabilizarse de su ira. Ahora que su ira estaba consciente, podía averiguar qué la estaba molestando y hablar de ello con Roberto directamente. Ella no habría podido hacer eso si no fuera por la humorística "invitación" de él a hablar.

El humor no siempre es el enfoque correcto. Pero cuando funciona, funciona bien.

3. La voluntad de seguir hablando. Dos personas que se aman y están motivadas para permanecer juntas tienen el poder de resolver prácticamente todos los conflictos. Resolver conflictos, sin embargo, requiere tiempo, paciencia y comunicación hábil. Las parejas tienen que encontrar un terreno común o estar bien con aceptar estar en desacuerdo.

Lleva un tiempo resolver conflictos porque puede haber muchos pasos para cubrir hasta que ambos se sientan escuchados. Hablar implica aclarar el problema, comprender el significado más profundo y la importancia del problema, asegurarse de que cada uno entienda la posición del otro, permitir las emociones que el tema evoca para cada persona, transmitir empatía el uno al otro y hacer una lluvia de ideas hasta que se encuentre una solución que se sienta adecuada para ambos.

Los problemas tienen que ser discutidos hasta que ambas personas se sientan mejor.

4. Comprender los conceptos básicos de cómo funcionan las emociones. Durante las peleas, las emociones dirigen el espectáculo. Las emociones están cableadas en todos nuestros cerebros de la misma manera. No importa cuán inteligentes o listos seamos, nadie puede evitar que surjan emociones, especialmente en tiempos de conflicto y amenaza. Es solo después de que las emociones se encienden que tenemos alguna opción sobre cómo responder. Algunas personas reaccionan inmediatamente, complaciendo sus impulsos. Así es como escalan las peleas. Otros hacen una pausa para pensar antes de actuar. Pensar antes de hablar o actuar es mejor porque nos da mucho más control sobre el resultado de nuestras interacciones.

Sin una comprensión de las emociones, tu pareja no te entenderá tan bien y podría criticarte por tus sentimientos o reaccionar mal.

Queremos a alguien que no tome nuestros estados de ánimo y quejas demasiado personalmente; alguien que en lugar de reaccionar tendrá curiosidad y preguntará qué nos ha molestado. Queremos a alguien que escuche sin ponerse a la defensiva, o al menos se esfuerce por eso. Queremos a alguien que sepa que a veces no hay nada que arreglar y que escuchar pacientemente es una herramienta poderosa para las parejas. Y queremos una pareja que exija ser tratada de la misma manera comprensiva y cuidadosa.

Honrar las emociones no significa que cuides las emociones de tu pareja a expensas de las tuyas; eso lleva al resentimiento. Honrar las emociones de tu pareja tampoco significa que permitas ser abusado. Significa que te importa cuando tu pareja está molesta y tratas de ayudar.

5. Comprende la importancia de establecer normas básicas. Al comienzo de una relación, las cosas suelen ir sin problemas. Pero cuando termina el período de cortejo, comienzan a surgir las diferencias y los desacuerdos. Antes de que surjan conflictos, es una buena idea hablar de establecer un conjunto de reglas básicas para las peleas.

Las reglas básicas son las normas de cómo pelear constructivamente. El objetivo es aprender formas específicas que pueden ayudarles mutuamente en medio de un desacuerdo. Por ejemplo, pueden aceptar hablar con voz tranquila en lugar de gritarse el uno al otro.

Al establecer reglas básicas, la idea es anticipar conflictos y argumentos y ensayar cómo hacer el control de daños. Haces esto antes de la pelea porque durante las peleas ni tú ni tu pareja serán racionales o tranquilos, ya que tu cerebro emocional te atacará temporalmente. El objetivo es mantenerse respetuoso y conectado mientras se trabaja a través de los conflictos. Tu pareja aprende a no empeorar las cosas para ti; y aprendes a no empeorar las cosas para ella. Debido a que cada uno de ustedes es experto en sí mismo, se enseñan lo que necesitan cuando se sienten mal, tristes, enojados y similares.

Todos tenemos diferentes factores desencadenantes. Voltear los ojos puede llevar a una persona al extremo sin tener ningún efecto sobre la otra pareja. Entonces, una regla básica podría ser NO VOLTEAR LOS OJOS. Acciones como irse en medio de una discusión, amenazar con terminar, hacer que tu pareja sienta celos, disminuirse entre sí con insultos, o ser físicamente agresivos son todos ejemplos de movimientos amenazantes que desencadenan reacciones de supervivencia primitivas en el cerebro. Nada bueno viene de eso.

Mis reglas básicas

1. No nos insultamos.
2. No nos alejamos en medio de una discusión sin expresar nuestra intención de regresar y reanudar la conversación.
3. No gritamos.
4. Nos recordamos que nos amamos y nos preocupamos el uno por el otro a pesar de que estamos enojados.
5. No descartamos los sentimientos del otro.
6. No amenazamos con dejarnos.
7. Una conversación no termina hasta que ambas personas se sienten comprendidas y mejor. Pero está bien tomar un descanso, siempre y cuando volvamos una hora o día más tarde para resolver el conflicto.

Qué maravilloso sería saber exactamente lo que tu pareja necesita cuando está molesta para que pudieras hacer algo para ayudarle.

Qué maravilloso sería si cuando te sintieras molesto, tu pareja supiera exactamente lo que necesitas para reconfortarte y te lo diera.

Qué maravilloso sería saber cómo manejar los desacuerdos antes de que ocurran.

Cuando nos vemos en medio de una pelea preguntándonos: "¿qué fue lo que una vez me gustó de ti?” Estarás feliz de haber discutido este momento antes. Tal vez incluso se rían juntos o se enorgullezcan del hecho de que se prepararon para este momento, compartiendo: "¡Bueno, aquí estamos, tal como lo discutimos!” Con suerte, eso trae algo de alivio a la miseria que trae una pelea con un ser querido.

Encontrar una pareja con estas 5 cualidades puede no ser fácil. Y tendrás que ser algo vulnerable, reunir el valor para hablar sobre estas cualidades. Aférrate a la creencia de que vales la pena y que mereces estar en una relación mutuamente satisfactoria. Además, aférrate al hecho de que muchas personas en el mundo quieren relaciones amorosas. Estas 5 cualidades te guiarán en la búsqueda de tu pareja amorosa.

Imagen de Facebook: Jacob Lund / Shutterstock